El porqué de las cosas

Un gran porcentaje de la población opina que es importante y positivo que la gente mayor estudie, que se forme aunque no sea con la finalidad de aplicar esos conocimientos en su vida laboral.

De todos modos, uno puede preguntarse, de qué sirve estudiar si no puedes ejercer después? Los  jóvenes tenemos la tendencia de pensar que el estudio es prácticamente solo el camino hacia el trabajo deseado, una manera de tener una buena formación con la que respaldar nuestra carrera profesional.

Es importante recordar, que no siempre fue así. Si miramos atrás, no hace falta ir muy lejos para darnos cuenta que no siempre ha sido así, no siempre estudiar ha estado al alcance de todos.

Para la tercera edad es importante estudiar para poder aprender todo aquello que por tiempo o por falta de medios no han podido hacer anteriormente, es un nuevo reto. ¿Qué les proporciona eso? Motivación para mantener la mente ocupada y despierta, autoestima, ya que ven que son útiles y capaces de hacer algo que les gusta, confianza, conocer a gente nueva y socializarse, abrirse a nuevas experiencias…

El aprendizaje, sea del tipo y la materia que sea, a veces, enriquece mucho más a nivel personal que intelectual, por eso es importante que las personas mayores también tengan esa oportunidad.

Alumnos adultos

Hay muchos tipos de alumnos con necesidades diferentes, una buena manera de empezar a agruparlos es por grupos de edades. Estos grupos tienen unas características generales comunes. Las hay de dos tipos: características positivas, aquellas que facilitan y potencial el proceso de aprendizaje y las características negativas que son las que producen el efecto contrario.
A continuación, me dispongo a enumerar dichas características de los alumnos en edades adultas.


Características positivas:

• Saben utilizar el pensamiento abstracto.
• Tienen expectativas respecto a su propio proceso didáctico y conocen que modo de estudio les da mejores resultados.
• Tienen mucha experiencia como consecuencia que responden bien a muchos tipos de actividades distintas.
• Tienden a ser más disciplinados y organizados, lo que les facilita la absorción de conocimientos.
• A diferencia de los niños y/o los adolescentes, tienen muy claro por qué están estudiando y que les van a dar estos conocimientos a su vida personal o profesional. La motivación és uno de los elementos más importantes en la adquisición de nuevos conocimientos, un alumno motivado puede hacer frente a sus dificultades educativas.  

Características negativas:

• Aquellos que hayan sufrido fracaso escolar o hayan tenido malas experiencias en clase, pueden sentirse ansiosos o sin confianza en ellos mismos y sus capacidades como alumnos.
• Pueden ser críticos ante ciertos métodos educativos y rechazarlos. Su experiencia previa en el aprendizaje los puede haber predispuesto a operar únicamente con un método de trabajo y puede ser difícil motivarlos para experimentar nuevos métodos.
• Muchas veces, la gente mayor está preocupada por el hecho de que su agilidad y agudeza mental puedan estar disminuyendo como consequencia del envejecimiento. Alan Rogers, señala que lo que dificulta el aprendizaje no es la edad sino el tiempo durante el que no se ha estudiado, como más tiempo haga más dificultad.

Como veis, lo importante es querer aprender y no darse por vencido en el proceso.

Fuente: Harmer, Jeremy. The Practice of English Language Teaching. Essex: Longman 2001.

un poco de inspiración

"Energy and persistence conquer all things".
Benjamin Franklin

Educar a adultos: mítos y verdades.

Hay bastantes mitos sobre la educación y la edad. Por ejemplo, comúnmente, se cree que los niños aprenden sin la necesidad de hacer ningún esfuerzo; por el contrario, que las posibilidades de éxito en los estudios una vez llegados a la edad adulta son escasas. La justificación de esta última afirmación es que los adultos tienen muchas barreras de aprendizaje, causados por su experiencia como alumnos (un individuo con una mala experiencia educativa será más reacio a estudiar) y en alumnos mayores se achaca el fracaso a los efectos de la vejez.

Hay algo de verdad en estas creencias pero es evidente que cada persona es un ser único, y por tanto, tendrá unas características concretas que juntamente con su motivación es lo que va a condicionar su desarrollo en la materia.

Fuente: Harmer, Jeremy. The Practice of English Language Teaching. Essex: Longman 2001.

¿Qué es esto ?

Sabemos que la enseñanza y por tanto el aprendizaje es distinto dependiendo de la edad del estudiante; y probablemente también va a mostrar diferencias en función de la materia que nos dispongamos a enseñar o aprender.

En este blog, a parte de aportar herramientas para el aprendizaje de la lengua inglesa especialmente pensadas para adultos, voy a dar un hincapié en la importancia de la didáctica de esta lengua en el ámbito de la socialización de personas mayores que lo estudian.

Espero que mis aportaciones os sean de utilidad y recordad que… nunca es tarde para empezar!